Intervenciones de Guillermo de Foucault y Néstor del Barrio

Los artistas Guillermo de Foucault y Néstor del Barrio han realizado dos murales artísticos para embellecer el Mercado de la Esperanza, dos intervenciones que pasan a formar parte de la vida cotidiana del Mercado y así embellecerlo, aportando soluciones estéticas en dos zonas muy transitadas e invitando a una reflexión sobre lo plástico, dotándolas de contenido.

Puesta en marcha por la Concejalía de Comercio y Mercados del Ayuntamiento de Santander, a través de esta iniciativa los artistas aportan su visión y establecen un vínculo entre la obra y la Comunidad adquiriendo su intervención artística un poder transformador que pone en valor la importancia del edificio. De esta manera se establece una relación entre arte y espacio público. 

El proceso creativo de los dos artistas en el entorno del Mercado es evocador de sueños, estímulo para la imaginación que lleva al antiguo comercio marítimo en mares y océanos remotos, como una de las manifestaciones más antiguas de la humanidad, esta es la esencia del trabajo de Guillermo. 

La mirada de Néstor del Barrio superpone capas que mezclan lenguajes antagónicos, como la pintura que deja fluir el color y reflexiona sobre los procesos industriales y la iconografía de internet relacionándolos con objetos presentes en el mercado”.

Se trata de dos jóvenes talentos cargados de creatividad nacidos en los noventa con carreras prometedoras: Guillermo de Foucault investiga a través de dibujos y apuntes sobre el acto instantáneo de crear, sus reflexiones componen un personal mapa conceptual, un laboratorio con referencias a sus espacios cotidianos descontextualizados.

Por su parte, Néstor del Barrio ha realizado numerosas intervenciones artísticas en forma de murales; muy influido por el arte urbano, con su obra pictórica plantea cuestiones como la velocidad y el mundo digital frente a la narrativa del paisaje creando un mundo propio, un lenguaje rico en contrastes que nos invita a reflexionar sobre nuestra realidad.

Los artistas plasman su visión personal de la esperanza con su propio estilo, su técnica mural y su forma de concebir el arte. El trabajo mural permanente va a llamar la atención en sí mismo por la originalidad de las piezas, plenas de creatividad, elaboradas sin otra limitación que la del espacio dando como resultado obras de indudable calidad que se integrarán en dos zonas muy visibles del mercado mejorando, además notablemente, su imagen.